En esta artículo vamos a hablar sobre una curiosa técnica de cultivo llamada Kokedama. Será una introducción, que en posteriores publicaciones iremos ampliando y explicando como usar los kits de EcogardenIrisana para crear fantásticas Kokedamas.
Kokedama es una técnica descendiente de la técnica de cultivo de los Bonsáis . Comenzó en Japón entorno al 1.600 DC, aunque no se hizo mundialmente conocido hasta el año 1990.
La palabra Kokedama significa literalmente “bola de musgo”: en Japón suelen reproducir escenas de la Naturaleza en su propio hogar, utilizan los Kokedama para crear un ambiente para la ceremonia del té y también como acompañamiento personal. Para los japoneses, los Kokedama les mantiene unidos a la Naturaleza y los suelen tener cerca gran cantidad de horas, mientras se trabaja o realizan cualquier actividad permitiéndoles estar en contacto con la Naturaleza.
Los Bonsais suelen ser arbole obligados a crecer en recipientes pequeños y con una determinada forma, usando una técnica de origen chino muy antigua. En la era EDO en Japón, entorno al 1.600 DC modificaron esta técnica usando una bola de sustrato sobre un platito, para no mojar la superficie donde se ponía. Posteriormente evolucionó al uso de una bola de musgo.
Podemos concretar diciendo que Kokedama es un tipo de Bonsái que se saca de su maceta. Como las raíces están muy compactas mantiene la forma del contenedor. Con el tiempo, la planta comenzara a desarrollar musgo en sus raíces y forma el Kokedama.
Esta técnica fue probada con numerosas plantas: Anthurium, helechos, palmeras pequeñas, como la Chanaedorea etc. Con el paso de los años, numerosas personas fueron perfeccionando la técnica base y añadiendo procesos.
Kokedama en el entorno.
Es un adorno refinado, natural y fácil de mantener. También es un buen sistema para el cultivo de plantas aromáticas.
Cuidado básico de un Kokedama.
El mantenimiento dependerá del tipo de planta que se cultive, aunque hay unas normas generales comunes a todos como son:
- Abundante luz pero no directa, para reducir la pérdida de agua.
- Evitar fuentes de calor y frío artificiales y las corrientes de aire.
- Se riega por inmersión de la bola de musgo en un recipiente, una vez por semana en invierno, dos veces o más en verano dependiendo del calor y el grado de humedad ambiente. En verano se aconseja pulverizar agua regularmente. Están llenas de agua cuando dejan de salir burbujas.
El abono siempre será líquido y disuelto en el agua de riego. Como el musgo es un ser vivo y parte del cultivo, 
debemos tener mucho cuidado con el abono. Es preferible una dosis bajas que una excesiva. Para este tipo de plantaciones, puede usar con total tranquilidad NutriAlive, que al ser orgánico, un exceso de dosificación no es un problema.
Otra opción es el Nutribase A+B, que porta todo lo que necesitan nuestras plantas, y es ideal ya que es especial para hidroponía. Pero mucho ojo con no pasarse de la dosificación, es preferible quedarse corto.
El musgo puede ser de varias especies diferentes.
El Kokedama, no solo tiene relación con el mundo de los Bonsáis, sino que podemos ver variantes en otras técnicas:
- El Nearai, que consiste en el cultivo de plantas sobre un pequeño cuenco de arcilla o sobre una roca, donde el sustrato está prácticamente al aire.
- El Kusamono, que son cultivos de plantas asociados al Bonsái para indicar la estación del año. Se cultiva sobre un pequeño cuenco colocado sobre una antigua madera lacada.
- Los Jardines verticales, o los jardines murales.
- Hidroponía, en su variante con sustrato, ahí es donde vamos a ver su relación con los Kits EcogardenIrisana.
Muro-jardín, elaborado por nuestra amiga Lidia, de Aloe-ingenieros.
El Kokedama siempre se instala sobre un soporte mineral: pizarra negra, pizarra verde, cerámica o sobre madera semi-preciosa o madera petrificada. Esta combinación de minerales y vegetales proporciona una nota muy moderna que hace referencia al jardín Zen japonés.
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