Es una planta aromática y medicinal. Son tantas sus propiedades que los griegos la consideraron una planta sagrada. Incluso encontramos un dicho popular que dice: << No tiene por qué temer a la muerte quien tiene Salvia en su huerta >>. Por si lo anterior fuese poco, cuando florece, nos regala la vista con unas hermosas flores violáceas.
La Salvia es una planta de la familia de las Lamiáceas o Labiadas. El género Salvia tiene cerca de 900 especies, la más conocida popularmente es la ‘Salvia Officinalis’. Su nombre viene del latín y significa “planta que salva”.
Así que haciendo caso al dicho, vamos a poner manos a la obra para tener en nuestro huerto en casa, una o varias plantas de Salvia.
DISTRIBUCIÓN.
Se encuentra en lugares rocosos y secos, poco productivos. Su origen es mediterráneo.
El género Salvia tiene una amplia distribución geográfica con tres regiones de diferente biodiversidad: 500 especies hay en América Central y Sudamérica, 250 en Asia Central y la cuenca del Mediterráneo y 90 en Asia Oriental.
Los monjes benedictinos fueron los que difundieron su cultivo en los jardines y huertos de los monasterios.
CARACTERÍSTICAS DE LA PLANTA.
Es un arbusto que puede llegar a tener 70 cm de altura. Las diferentes especies pueden ser hierbas anuales o bienales o perennes y también subarbustos leñosos.
Tiene tallos angulares característicos de la familia Lamiaceae, en gran número y tomentosos grisáceos.
Sus hojas son pecioladas, verdes, enteras y en ocasiones dentadas o pinnadas. Los tallos florales producen pequeñas brácteas diferentes a las hojas basales, y en algunas especies, estas brácteas son muy llamativas.
Las inflorescencias nacen en racimos o panículas que producen flores de diversos colores: violeta azulados o rosas los más frecuentes, pero también blancos o amarillos.
El fruto es una suave núcula de forma ovoide, más larga que ancha, que en muchas especies está cubierta de una capa mucilaginosa.
En la mayoría de las especies del género Salvia, aparecen tricomas o pelillos sobre la superficie de hojas, tallos y flores, que evitan la pérdida de agua de la planta. En ocasiones, estos tricomas son glandulares y si se frotan, algunas de sus células se rompen, liberando los aceites volátiles de estas plantas, que resulta desagradable para algunos insectos y para el ganado.
La floración tiene lugar desde finales de primavera a mediados de verano.
CULTIVO EN SUSTRATO CONVENCIONAL.
Le gustan los lugares abrigados, y tiene un buen comportamiento en interior. Soporta los lugares sombríos, pero prefiere el sol, siempre que no incida directamente. Le gustan los lugares ventilados.
Debe regarse con moderación, 2 o 3 veces por semana, en cultivo de sustrato convencional. No tolera encharcamientos en el sustrato que son la principal causa de muerte de estas plantas. Soportan la sequía y no requieren excesiva humedad atmosférica. Es aconsejable, esperar a que se seque el sustrato entre un riego y otro.
En caso de usar la mesa de cultivo vertical, EcogardenIrisana, es importante recurrir a sustratos ligeros y muy porosos, especialmente en el cultivo de la Salvia.
CULTIVO HIDROPÓNICO DE LA SALVIA.
Se puede cultivar en el Kit Hidropónico, consiguiendo muy buenos rendimiento, como observamos en nuestras pruebas.
El buen drenaje del sustrato, la presencia de agua y de nutrientes, crean un entorno ideal para el cultivo de la Salvia. Como nutriente pode usar tanto NutriBase con la dosificación estándar recomendada, una combinación de NutriBase y NutriAlive, o solo NutriAlive si queremos hacer un cultivo “organopónico”.
Todas las anteriores sugerencias dan buenos resultados, pero la más productiva es la combinación de NutriBase y NutriAlive.
ABONOS.
La Salvia se cultiva fundamentalmente por sus hojas, así que a la hora de abonar debemos elegir un nutrición rica en nitrógeno, pero sin descuidar el fosforo y el potasio, además de disponer de microelementos como magnesio, hierro, manganeso, cobre, zinc, boro y molibdeno.
Con NutriBase, de EcogardenIrisana, conseguimos muy buenos resultados, ya que tenemos una muy buena cantidad de nitrógeno y aporta todos los microelementos necesarios, pero si queremos un cultivo de tipo ecológico, funciona perfectamente el NutriAlive, que contiene bastante nitrógeno, todos los microelementos que demanda la planta y otros compuestos que la benefician. Si deseamos una mejor producción no debemos descuidar la nutrición foliar, pulverizando un preparado de 10ml de NutriAlive por litro de agua. Esto ayuda a fortalecer las hojas y mejorar su calidad.
Para el cultivo convencional en la mesa de cultivo vertical, el Humus EcogardenIrisana, es un gran complementos, sobre todo tras la poda.
PODA
Es una planta poco exigente con respecto a la poda. Se suele podar después de la floración, para estimular su crecimiento, cortando los tallos leñosos y dejando los brotes nuevos.
Si observamos hojas o ramas dañadas, es mejor cortarlas y retirarlas, para evitar posibles infecciones.
Sueles ser muy productiva durante 4 o 5 años. Pasado este tiempo suele degradarse y es mejor reponerla.
[…] Rama de Salvia secada a la sombra (entre 5 y 10 […]